domingo, 16 de septiembre de 2007

Esquerra Unida expulsa a Mónica Oltra y Mireia Mollà

El Consell Nacional de Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) ha resuelto hoy expulsar de la formación a las diputadas de Compromís y miembros de la corriente Esquerra i País Mònica Oltra y Mireia Mollà, con 58 votos a favor (95 por ciento de los votos emitidos) y 3 votos en contra (5 por ciento). EFE En la decisión no participaron 17 los miembros de la corriente liderada por Joan Ribó y Josep Bort Projecte Obert que, aunque asistieron al Consell Nacional en el que participaron 78 afiliados, abandonaron la sala en el momento de proceder a la votación porque según Bort, "ya habíamos dejado claro que hacerla efectiva (la expulsión) dinamitaba todos los posibles acuerdos y llevaba a la formación al abismo".

Mònica Oltra, que no asistió porque se encontraba en unas "jornadas de trabajo" en Barcelona, manifestó a EFE que recibió la noticia de su expulsión "con dolor y con la certeza de que políticamente están cometiendo un error", porque a su juicio, "no tienen motivos estatutarios" para hacerlo.

Oltra anunció que tanto ella como Mireia Mollà recurrirán la expulsión e irán "a todos los órganos (del partido) para defender" sus "derechos como afiliadas" y lamentó que en el seno de la formación se "haya perdido la oportunidad de dialogar y volver al acuerdo".

El responsable de Comunicación de Esquerra Unida, Manuel Colomer, manifestó a EFE que la decisión de expulsar a las dos diputadas no supone la ruptura de la coalición electoral de Compromís pel País Valencià, porque, según dijo, no renuncian a que el Bloc Nacionalista Valencià "rectifique" y "vuelva" al acuerdo que mantiene con EU, Els Verds e Izquierda Republicana.

Por su parte, Oltra consideró necesaria una reedición de Compromís encabezada por la diputada en el Congreso de los Diputados Isaura Navarro de cara a las elecciones generales y dijo que sería "posible" salvar la crisis dentro de Esquerra Unida si "las partes se sientan a hablar, porque la organización no sólo es Gloria Marcos".

Josep Bort consideró también "deseable" que Isaura Navarro sea la "única candidata" de los partidos situados a la izquierda del PSPV para las elecciones generales y manifestó que desde Projecte Obert trabajarán para que haya una "opción conjunta" porque consideran un "suicidio político" la presentación de dos candidaturas.

"Sabemos que solos no vamos a ningún sitio y que cerrarse en sí mismo no es una opción, pero no sé decir qué haremos si se presentan dos candidaturas porque ahora lo que tenemos que hacer es buscar el sentido común y hablar", dijo Bort, para quien la situación es "muy difícil" por la falta de voluntad de diálogo de Gloria Marcos.

Por otra parte, el Consell Nacional sometió también a votación el informe realizado por Marcos en el que analiza la crisis política vivida en el seno del grupo parlamentario Compromís en Les Corts y sus consecuencias políticas, que fue aprobado por 59 votos a favor (75%), 17 votos en contra (21%) y 2 abstenciones.

El informe, que Bort considera que es "autocomplaciente" y en el que falta "autocrítica", califica de "deslealtad manifiesta" la actitud del Bloc, resalta que EUPV "en todo momento ha cumplido con los acuerdos firmados" y aboga por potenciar el diálogo con Els Verds del País Valencià e Izquierda Republicana para las elecciones generales.

El informe dice también que la formación sufre "la mayor crisis" desde su fundación hace 21 años.

Respecto a la posible escisión de EU después de que Esquerra i País haya anunciado el congreso constituyente de un nuevo partido, Iniciativa del Poble Valencià, Colomer manifestó que "no queremos que se vaya nadie de Esquerra Unida, sino aquellos que no cumplen con los estatutos" y opinó que si Pasqual Mollà "decide romper" con Esquerra Unida "no va a arrastrar a toda su gente".

"En todo caso intentaremos que las bajas sean las mínimas", dijo Colomer, mientras que Mollà manifestó que "la decisión no avanza en la ruptura de Esquerra Unida, sino en el fracaso de Glòria Marcos como coordinadora".

Respecto a las declaraciones del responsable de finanzas de Izquierda Unida Federal, Rubén Ferrandis, que advirtió a Marcos y al PCPV de que IU "no respaldará ni reconocerá" las expulsiones, Colomer dijo que IU Federal no es "competente en este tema" y que no puede prevalecer la visión de "alguien que no es valenciano sobre la que se tiene dentro de EU".

La expulsión de dos diputadas pone a Esquerra Unida a la puerta de la escisión

Glòria Marcos pasa factura a Oltra y Mollà por hacerle frente en el grupo de Compromís

ADOLF BELTRAN - Valencia - El Pais,16/09/2007

Esquerra Unida acordó ayer la expulsión de dos de sus diputadas autonómicas, Mònica Oltra y Mireia Mollà, pertenecientes a la corriente Esquerra i País, que plantaron cara en el grupo de Compromís pel País Valencià a la coordinadora de la organización, Glòria Marcos. La mayoría que sostiene a Marcos impuso su criterio pese a que sectores como Projecte Obert, que lidera Joan Ribó, apelaron a la cordura. A dos meses de su asamblea, Esquerra Unida se ve abocada a una escisión, mientras los seguidores de Pasqual Mollà se preparan para convertirse en partido político.

La crisis de la izquierda valenciana se agudiza y pocos son los que se atreven a aventurar un desenlace que no conduzca a la escisión de Esquerra Unida y a la pérdida del escaño que hoy ocupa la valenciana Isaura Navarro en el grupo de Izquierda Unida en el Congreso de los Diputados. La mayoría que apoya a Glòria Marcos, cuyo principal componente es el sector ortodoxo del Partit Comunista del País Valencià, pasó ayer factura a la minoría crítica que encabeza Pasqual Mollà. El Consell Nacional de Esquerra Unida, reunido en Valencia, decidió expulsar de la formación a las diputadas Mònica Oltra y Mireia Mollà, pertenecientes a la corriente Esquerra i País, por 58 votos a favor y tres en contra de un total de 119 integrantes del órgano directivo con derecho a sufragio. Ni los representantes de Esquerra i País ni los del colectivo Projecte Obert participaron en la votación, unos porque no la consideran legítima y los otros porque creen que lleva a la organización hacia el desastre.

De este modo, se ratificó la propuesta de resolución elaborada por la Comisión Instructora del expediente sancionador abierto a las parlamentarias por considerar que éstas habían vulnerado los acuerdos firmados por la coalición Compromís pel País Valencià al proponer un representante del grupo en RTVV distinto al presentado por la coordinadora general de EUPV, Glòria Marcos; así como por sustituir a ésta como portavoz, dejándola en minoría, y por designar sus cuentas personales y no las de la organización para el ingreso de sus percepciones económicas.

El informe político que defendió Marcos durante el Consell Nacional fue aprobado por 59 votos a favor, 17 en contra y dos abstenciones. Los votos en contra corresponden al colectivo Projecte Obert, cuyo líder Joan Ribó trató sin éxito de pedir cordura a la militancia. La intervención de Marcos fue muy beligerante con sus socios del Bloc Nacionalista Valencià en la coalición de Compromís pel País Valencià, a los que atribuyó una "deslealtad manifiesta" por negarse a aceptar a su candidato al consejo de RTVV y posteriormente destituirla como portavoz con el apoyo de las dos diputadas ahora expulsadas. La coordinadora general hizo evidente que la dirección de Esquerra Unida apuesta por prescindir en las próximas elecciones generales de otras alianzas que no sean con los pequeños partidos de Els Verds e Izquierda Republicana. Pese a ello, el responsable de comunicación de EU, Manuel Colomer, manifestó tras el Consell Nacional que la expulsión de las diputadas Oltra y Mollà no supone la ruptura de Compromís ya que su organización no renuncia a que el Bloc "rectifique" y vuelva al acuerdo.

Quienes es difícil que vuelvan, tras la expulsión de sus dos parlamentarias, porque prácticamente se están marchando son los integrantes de Esquerra i País, que tienen previsto constiturise en partido político el próximo día 20 de octubre. La inspiración de la nueva formación queda reflejada en su nombre, Iniciativa del Poble Valencià, una denominación que remite a la Iniciativa que lidera Joan Saura en Cataluña..

Mònica Oltra, ausente de la reunión, declaró haber recibido "con dolor" la noticia de su expulsión, anunció que tanto ella como Mireia Mollà recurrirán la medida y advirtió de que se trata de "un error político" que abunda en la línea de errores que han llevado a Esquerra Unida a fracasos como el de las elecciones municipales del 27 de mayo. En esos comicios, la organización perdió su representación en los ayuntamientos de Valencia y Alicante tras haber rechazado presentarse bajo la fórmula de la coalición Compromís pel País Valencià, con la que concurrió a las elecciones autonómicas.

"Esto, políticamente, es un suicidio"

La retórica que impera en el seno de Esquerra Unida destila más adrenalina que sentido común. "No queremos que se vaya nadie sino aquellos que no cumplen con los estatutos", dijo a la agencia Efe el responsable de comunicación, Manuel Colomer, quien añadió que, si "decide romper" Pasqual Mollà "no va a arrastrar a toda su gente". El portavoz concluyó: "En todo caso, intentaremos que las bajas sean las mínimas".

La coordinadora de EU, Glòria Marcos, reconoció en su informe que la organización sufre "la mayor crisis" desde que se fundó hace 21 años. Por su parte, el líder de Esquerra i País, Pasqual Mollà, fue contundente: "La decisión de expulsar a las dos diputadas no avanza en la ruptura de Esquerra Unida sino en el fracaso de Glòria Marcos como coordinadora". La distancia entre ambos dirigentes fue palpable, incluso físicamente.

"Esto, políticamente, es un suicidio", clamó Joan Ribó, de Projecte Obert, que se sitúa entre la mayoría hegemonizada por los comunistas y la corriente nacionalista de Mollà. "Durante el debate", explicó Ribó, "he comparado lo que ocurre ahora con la poda que hizo Carrillo a inicios de la democracia y que destrozó el PCE". En su opinión, el lenguaje de enfrentamiento impide tender puentes de diálogo, como reclama su sector. Ayer, durante el debate, Glòria Marcos le espetó que sus intentos de conciliación han fracasado "porque una parte no quiere". La coordinadora aludía a los seguidores de Mollà, pero Ribó cree que la mayor responsabilidad recae sobre Marcos y "su parte".

Representantes de Projecte Obert, entre cuyos miembros hay militantes comunistas, se entrevistaron la semana pasada con la secretaria general del PCPV, Marga Sanz, en busca de una distensión que no se ha producido. Pese a ello, están dispuestos a insistir hasta la Asamblea de EU, que se celebrará en noviembre y tiene las funciones de un congreso. Ribó no es optimista -"vamos directamente hacia el abismo", dice- y reconoce que tras la asamblea su colectivo tendrá que afrontar una "reflexión".

Por su parte, la diputada Mònica Oltra, portavoz de Compromís pel País Valencià en las Cortes, no espera que su expulsión tenga efectos en el grupo parlamentario. Como casi todo el mundo, da prácticamente por hecho que en las generales de marzo habrá dos candidaturas. La actual diputada de Izquierda Unida Isaura Navarro debería concurrir, según Oltra, al frente de lo que representa Compromís pel País Valencià, una "izquierda diversa y valencianista".

EU exige a Oltra y Mollà su escaño en las Corts tras acordar su expulsión

Las afectadas recurrirán el acuerdo y denuncian la falta de diálogo de la mayoría
J. M. Rambla, Valencia Levante-EMV, 16/09/2007

EU exigirá a Mònica Oltra y Mireia Mollà sus actas de parlamentarias autonómicas después de que ayer el Consell Nacional acordara su expulsión de la organización tras acusarlas de incumplir los estatutos y los acuerdos de la dirección. Una medida que fue apoyada en votación secreta por el 95% de los miembros del Consell Nacional presentes, con sólo 3 votos en contra.

El máximo órgano de dirección de EU también respaldó el informe sobre las crisis iniciada por el rechazo de las diputadas al representante de EU en RTVV y agravada por los acuerdos entre ambas y el Bloc para destituir a Glòria Marcos como portavoz de Compromís en las Corts y para abrir una cuenta donde ingresar las subvenciones del grupo parlamentario. El texto fue respaldado por el 75,6% de los 78 votos emitidos, mientras un 19,5% de los asistentes rechazó una interpretación que consideraron parcial y carente de autocrítica.


Pese a la rotundidad de los resultados, Esquerra i País cuestionó la validez de estas expulsiones, por considerar que para prosperar era necesaria la mayoría absoluta de los 118 miembros del Consell Nacional y no sólo de los 78 presentes durante su votación.


Así mismo, el Consell Nacional también se pronunció sobre las declaraciones a Levante-EMV del responsable de finanzas de IU Rubén Fernández alertando de que la dirección federal no respaldará ninguna expulsión, unas manifestaciones que la mayoría consideró una injerencia y que, incluso, provocaron a última hora la aprobación de una resolución -con 28 votos a favor y 3 abstenciones- pidiendo la dimisión de Fernández.


Durante el debate, Glòria Marcos rechazó las críticas de la minoría que le acusan de no respetar la diversidad interna. «La pluralidad es una cosa y otra la marrullería», destacó . Así mismo señaló que «me encanta la discrepancia, pero al final hay que aceptar las votaciones, porque quien se sitúa fuera de las decisiones de la mayoría, se sitúa fuera de los estatutos» Por su parte, el secretario de organización, Ricardo Sixto, destacó que la decisión de ayer suponía una vía para restituir la legalidad. A su juicio, «ahora sólo nos queda exigir a Oltra y Mollà que devuelvan su escaño y pedirle al Bloc que diga con claridad si quiere apoyar a Compromís -y por tanto se restituye a Glòria Marcos- o prefiere respaldar a dos tránsfugas». Muy distinta fue la lectura desde Esquerra i País. En este sentido, Pasqual Mollà consideró los acuerdos «un inmenso error y una irresponsabilidad». A su juicio, éstos carecían de «validez política» por considerar que en el proceso no se había respetado la pluralidad. «Han optado por la confrontación, incluso con la dirección federal de IU» , lamentó. También, Joan Ribó, en nombre de Projecte Obert, resaltó que EU está viviendo su «peor crisis» y apuntó como causas la «derrota electoral municipal» y la «pervivencia de la política de exclusión» .


Tras conocer los resultados del Consell Nacional, Mònica Oltra adelantó su intención de recurrir. A su juicio, «han tomado una decisión injusta, que no se ajusta a los estatutos, ni a la legalidad» . En su opinión, «desoír las llamadas al diálogo tanto nuestras como de IU añade gravedad al ya de por sí camino fracasado de Glòria Marcos y la parte más ortodoxa y dura del PC».

El Consell Nacional aprueba la salida de Oltra y Mollà con el voto a favor del 49% de sus miembros

RAFAEL MUÑOZ/ VALENCIA, Las Provincias, 16/09/2007

La crisis interna que sufre Esquerra Unida vivió ayer uno de sus momentos más importantes y esperados. Sin embargo, a pesar de lo llamativo de la medida adoptada –la expulsión de las dos diputadas nacionalistas de EU en Compromís– todo apunta a que éste no es el último capítulo de una trama que aglutina conspiraciones en la sombra, descalificaciones y amenazas.


EU aprobó con el voto a favor de 58 de sus miembros –el 49,15% sobre el total, a un voto de la mayoría absoluta– la propuesta de expulsión de la formación de Mónica Oltra y Mireia Mollà. La resolución recoge que debe ser aprobada “por el Consell Nacional por mayoría absoluta de sus miembros”. Sin embargo, desde EU apuntaron ayer que se trata de “la mayoría absoluta de los miembros presentes”.

Las dos diputadas de Compromís, que forman parte de la corriente nacionalista Esquerra i País, fueron acusadas de actuar en contra de la línea política establecida por la dirección de EU, y de incumplir el régimen económico de caja común de la formación para los cargos públicos.

El Consell Nacional se inició con el debate sobre un informe elaborado por la dirección en el que se hace balance de todo lo acontecido durante los últimos meses en la “mayor crisis” que sufre EU desde su fundación hace 21 años. En él la dirección critica “la estrategia de generar ruptura” de los sectores críticos con la gestión de Marcos, e insta a los afiliados “a cumplir y respetar las decisiones de los órganos de EU”.

Dicho informe, que fue aprobado con el voto a favor de 59 de sus miembros, el rechazo de 17, y dos abstenciones, recogía que los hechos acaecidos “hacen imposible reeditar el Compromís” de cara a las generales, lo cual es una confirmación oficial de un secreto a voces, y es que en EU ya han descartado desde hace tiempo volver a unirse al Bloc para los próximos comicios.


El debate previo a la votación, que contó con la intervención de más de una veintena de miembros del Consell Nacional, fue largo y acalorado, con descalificaciones personales incluidas, sobre todo durante las intervenciones de los dirigentes de los sectores críticos.

Uno de esos momentos se produjo cuando Joan Ribó, de Projecte Obert, acusó a los responsables de organización de EU de haber cobrado todo el sueldo del mes de agosto mientras los demás trabajadores sólo habían cobrado la mitad. En ese momento Ricardo Sixto –secretario de Organización– le lanzó su libreta bancaria personal en modo de repulsa hacia “las acusaciones” de Ribó.

Sin embargo, cabe destacar que, a pesar de que el tema principal que se estaba dirimiendo era la expulsión de las dos diputadas críticas, se pudo notar en el ambiente cierta incertidumbre sobre el futuro de la formación de cara a las próximas elecciones del mes de marzo.

Después de que este diario informara el pasado 25 de agosto de que se habían producido contactos entre EiP, el Bloc y Els Verds de Carles Arnal para un posible pacto electoral, ayer se hicieron continuas referencias a esa posible coalición durante todo el Consell Nacional. De hecho, en el mismo informe que fue aprobado se califica como “provocación” la posibilidad de ese pacto. Incluso Glòria Marcos le llegó a pedir a Pasqual Mollà, líder de EiP, hasta en dos ocasiones, que se pronunciara públicamente al respecto.

Oltra y Mollà recurrirán

Las dos diputadas expulsadas, que no asistieron al Consell Nacional al tener un compromiso en Barcelona, confirmaron ayer que recurrirán la sanción impuesta por la dirección de EU ante la Sindicatura de Greuges del partido.

“Agotaremos todas las vías para defendernos de esta injusticia”, señaló Oltra, que afirmó encontrarse “dolida” por la decisión adoptada por la dirección de EU, y aseguró que “lamentamos que persistan en esta actitud, en no asumir sus errores, y en culpar a todo el mundo de ellos”. Oltra destacó que tanto Mollà como ella misma se siguen “considerando miembros de EU”.



Marcos reclama la portavocía de Compromís

Tras la expulsión de las dos diputadas críticas de EU, entre las que se encuentra la actual síndica de Compromís pel País Valencià, se vuelve a abrir la polémica sobre quién debe y puede ocupar el cargo de portavoz del grupo.

El acuerdo que los cinco partidos que conforman la coalición firmaron ante notario el pasado 27 de enero de 2007, en su cláusula duodécima, estipula que le corresponde “a un diputado de EU el cargo de síndico del grupo”.

Tras confirmarse la expulsión de Mónica Oltra del partido, el problema que surge ahora es que ese requisito que establece el pacto electoral no se cumple. Por ello, desde EU señalaron ayer que su intención es “ir a reclamar a donde haga falta” que Glòria Marcos vuelva a ser la portavoz del grupo parlamentario de Compromís, y no descartaron que el caso pueda llegar a los tribunales.

Desde la dirección de EU aseguraron que ahora “la pelota está en el tejado del Bloc”, y que debe ser la formación nacionalista “la que en la próxima reunión vote a favor de la restitución de Marcos” como síndica del grupo.

Por su parte, la actual portavoz del grupo parlamentario señaló que la decisión “injusta y antiestatutaria” que ha tomado la dirección de EU de expulsarle a ella y a su compañera Mireia Mollà de la formación “no va a interferir en la actividad del grupo”, y añadió que “no tiene por qué afectar ni a la composición del grupo ni a los cargos internos”.



La dirección federal de Izquierda Unida volvió ayer a mostrar su desacuerdo con la expulsión de las dos diputadas críticas con la gestión de Glòria Marcos al frente de EU y del grupo parlamentario de Compromís. Según señalaron fuentes internas de la dirección federal a este diario, “a efectos del partido ambas diputadas siguen siendo miembros de IU hasta que la decisión no sea en firme”.

El Consell Nacional de EU también decidió ayer pedir a IU la dimisión de Rubén Fernández, responsable de finanzas federal, por dos comunicados en el que respaldaba a las diputadas y en el que acusaba a la dirección de EU de mentir acerca de la deuda de la diputada nacional valenciana. Desde IU aseguraron que dicha petición “no tiene ningún valor jurídico porque se trata de un cargo federal”.

Oltra y Mollà agotarán "todas las vías" para defender su "calidad de militantes"


Las diputadas Mònica Oltra y Mireia Mollà, a quienes el Consell Nacional de EUPV acordó expulsar de la formación por 58 votos a favor y tres en contra, agotarán "todas las vías" para "defender" su "calidad de militantes de EUPV", según aseguró Oltra, quien afirmó que su condición como síndica de Compromís "es algo que depende del grupo parlamentario" por lo que "una decisión injusta de EUPV no tiene por qué afectar ni a la composición del grupo ni a los cargos internos".

"Eso es algo que depende del grupo parlamentario, que expresó su voluntad mayoritaria de que fuera la síndica de Compromís, y la decisión injusta y antiestutaria de EUPV no tiene por qué afectar ni a la composición del grupo ni a los cargos internos", señaló.

Así lo indicó, tras la decisión del Consell Nacional de EUPV, que acordó expulsar de la formación a ambas parlamentarias, pertenecientes a la corriente Esquerra i País (EiP), con un total de 58 votos a favor y tres en contra.

Oltra, -que no asistió al Consell Nacional porque se encuentra en Barcelona en una jornada del ´Triangle Mar Blava´ para tratar de la "izquierda que avanza", "casi una alegoría", dijo-, explicó que recibió con "dolor" la noticia de la votación favorable a la expulsión, a lo que se añade lo que considera que es un "error político".

En este sentido, manifestó que "aparte del dolor personal" que le produce "el saber que han tomado una decisión injusta, que no se ajusta a los estatutos, ni a la legalidad, se añade que es un error político". En su opinión, "desoír las llamadas al diálogo tanto nuestras como de IU añade gravedad al ya de por sí camino fracasado de Glòria Marcos -coordinadora de EUPV- y la parte más ortodoxa y dura del Partido Comunista".

La diputada lamentó asimismo que durante la celebración del Consell Nacional se haya pedido la dimisión de dirigentes federales de IU como Rubén Fernández, responsable de Finanzas, por el apoyo que les ha manifestado. "Nos parece que evidencia una vez más el sectarismo y el camino errático que ha emprendido lamentablemente la dirección actual de EU", insistió.

No obstante, manifestó que aparte de la "situación anímica personal de estar dolida", tiene "la esperanza de estar en un camino político, el de la constitución de Iniciativa del Poble Valencià como partido político para la construcción de una izquierda altenativa" en la Comunitat Valenciana, que se define como "valencianista y ecologista, que es el camino que hace avanzar a la izquierda plural, diversa, donde el diálogo es una manera de relacionarse y no la imposición y el sectarismo y las decisiones injusta como es el caso de Glòria Marcos".

Oltra hizo hincapié en que recurrirán esta decisión ante la Sindicatura de Greuges de EUPV, un órgano interno al que se pueden apelar ante las decisiones sancionadoras, según explicó, y "agotarán" tanto "la vía interna como externa para defender nuestra calidad de militantes de EU". "Agotaremos todas las vías para defender la legalidad y la justicia que es que somos militantes de EUPV y no hay ningún motivo estatutario ni legal para que nos expulsen".

Crónica de dos expulsiones anunciadas

EU expulsa a Oltra y Mollà con 58 votos a favor y tres en contra

LAS DOS EXDIPUTADAS PRESENTARON UN RECURSO PARA SUSTITUIR A GLÒRIA MARCOS COMO SÍNDICA


El Consell Nacional de Esquerra Unida del País Valencià (EUPV) reunido este sábado en Valencia ha decidido expulsar de la formación a las diputadas Mónica Oltra y Mirella Mollà, pertenecientes a la corriente Esquerra i País (EiP), con un total de 58 votos a favor y tres en contra. El expediente sancionador abierto a las parlamentarias destacaba que éstas habían vulnerado los acuerdos firmados por la coalición Compromís pel País Valencià al proponer un representante del grupo en RTVV distinto al presentado por la síndica del grupo, Glòria Marcos, sustituir a ésta como síndica y designar sus cuentas personales para el ingreso de sus percepciones económicas, "sin haber realizado ingreso alguno a EU".

Según la resolución, dichos hechos son constitutivos de dos faltas muy graves, los dos primeros por considerarse "actos contrarios a los principios, valores y línea política de EUPV" y el último por incumplir el artículo estatutario según el cual el régimen económico de los representantes de la formación que ocupan cargo público "es el de caja común", por lo que éstos "deben ingresar sus remuneraciones por todos los conceptos en EUPV".

Asimismo, recoge que las alegaciones vertidas por Oltra y Mollà, ausentes en la sesión de hoy, en el trámite de audiencia ante la Comisión Instructora "en modo alguno desvirtúan la extrema gravedad de su conducta, ni pueden justificarla, ni atenuarla". Por ello, estima que procede imponer a ambas la sanción de expulsión, de conformidad con lo previsto en el artículo 49 de los Estatutos de EUPV.

En su sesión de este sábado, el Consell Nacional aprobó por un total de 59 votos a favor, 17 en contra y dos abstenciones el informe presentado por Marcos -quien a su vez accedió a introducir algunas modificaciones-, en el que ésta afirma que la que considera "la mayor crisis de la historia de EUPV", se resolverá con la "salida de algunos miembros" del partido y apuesta por "seguir manteniendo la democracia interna y el pluralismo, junto a la necesidad de reestablecer la unidad y el cumplimiento de los estatutos y de los acuerdos de los órganos de dirección".

Durante el debate previo a la votación del mismo, la secretaria general del Partit Comunista del País Valencià (PCPV), Marga Sanz, aseveró que Oltra y Mollà "se han enfrentado a los acuerdos de la organización y al sentir de los más de 3.000 afiliados", además de haber "incumplido los acuerdos de la coalición y situado al grupo en una crisis sin precedentes".

Sanz manifestó que detrás de esa actitud "subyace la conformación paulatina de un proyecto político al margen de EUPV", algo que, a su juicio, "dinamita el acuerdo de Compromís", ya que "parece que pretendan presentar una lista electoral que confronte en las elecciones generales" con esta formación. Así, remarcó que este proyecto "no debería tener apoyo ni oxígeno" por parte de EUPV, al tiempo que pidió al Bloc "reflexión" para que "vuelva a la legalidad de los acuerdos" de la coalición.

"Una hoja de ruta diferente"

Por contra, Pasqual Mollà, perteneciente a la corriente EiP, afirmó que ellos también podrían pensar que "una parte de EUPV tenía una hoja de ruta diferente", puesto que, entre otras cuestiones, cometieron la "tremenda barbaridad" de intentar modificar el sistema de configuración de las candidaturas electorales y además, añadió, durante las elecciones "boicotearon las intervenciones de todo un sector" y ahora tratan de "denigrar" al anterior grupo parlamentario.

Así, aseveró que lo sucedido son "las consecuencias de hacer las cosas sin atender a la pluralidad". "Seguramente nos habremos equivocado en algunas cosas, pero no hemos sido los únicos", agregó Mollà, quien mostró su "absoluta convicción" de que la expulsión de ambas diputadas supondría "uno de los más grandes errores que se ha podido cometer".

Pasqual Mollà hizo hincapié en la "voluntad de diálogo" de EiP, al tiempo que criticó que, "por primera vez en la historia de EUPV", la citada Comisión Instructora "es unilateral" algo que, a su juicio, "la descalifica de entrada" puesto que "sólo representa al 56 por ciento" de la formación.

Causas de la "peor crisis" de EUPV

Por su parte, Joan Ribó, que habló en nombre de la corriente Projecte Obert, resaltó que EUPV está viviendo su "peor crisis" y apuntó como causas la "derrota electoral a nivel municipal", la "pervivencia de la política de exclusión" en la elección de candidatos y la, en su opinión, "mala gestión de la crisis" del grupo parlamentario de Compromís.

Ribó consideró una "paranoia política" el informe presentado por Marcos y apostó por "abrir vías de diálogo" sin recurrir a la expulsión de las parlamentarias. "Que no nos busquen para ser soldados en ninguna guerra", afirmó el ex diputado, quien se mostró partidario de que "se reedite alguna cosa parecida" a Compromís "con la participación del Bloc".

Llegado su turno, Glòria Marcos reivindicó que la democracia "no puede ser instrumental" y por ello, dijo, "no se puede evitar el acuerdo parlamentario" para llevar a cabo "repartos" entre un grupo de personas. "Me encanta la discrepancia -confesó-, pero se resuelve votando cuando no hay acuerdo".

Restablecer los estatutos

Remarcó también que "no hay mediación" posible "mientras no se restablezcan los estatutos" y se lleve a cabo un "debate a fondo razonable", y, en este sentido, instó a Ribó a "no dar lecciones de hacer acuerdos", además de advertirle de que no iba a permitir "despropósitos" ni "intentos de desautorizar o atacar" sus palabras.

Por otro lado, uno de los participantes en la sesión pidió la dimisión del responsable federal de finanzas, Rubén Fernández, por entender que "coarta la soberanía" de la formación. Respecto a la actitud a tomar de cara al Bloc, distintas voces reflejaron la controversia existente en torno al asunto, ya que, mientras algunos lo emplazaban a "reflexionar y resituarse en los acuerdos" de la coalición, otros se mostraban totalmente contrarios a emprender cualquier otro tipo de empresa juntos.

La sesión celebrada hoy, que comenzó a las 10.45 horas y se prolongó hasta más de las 15.00 horas, se desarrolló en un clima de tensión contenida entre las distintas corrientes que aplaudían efusivamente o reprobaban las palabras de los participantes. En la misma, el Consell Nacional aprobó también la convocatoria de asamblea para el 17 de noviembre, que obtuvo 41 votos favorables, ocho en contra y una abstención